domingo, 23 de febrero de 2014

Paseando en Vespa

Os voy a enseñar uno de mis mayores tesoros materiales y al mismo tiempo, uno de los divertimentos que tengo, tanto para admirar y pasear, como para "jugar". Y no es otra cosa que esta Vespa 125 N del año 1958. 


Llevaba mucho tiempo buscando una Vespa clásica que al mismo tiempo no tuviese una cilindrada superior a los 125 c.c., de forma que pudiese conducirla sin carnet de moto. Después de mucho buscar y buscar, a través de muchas páginas, me encontré con esta que estaba a la venta en mi misma localidad. Tras negociar y pagar en parte con otra que tenía, resultado de un regalo de mi amigo Chema, me hice por fin con ella.

Externamente estaba bastante bien pues su anterior propietario la recogió en un estado lamentable y con un amigo la restauró. De todo esto dan fe las numerosas fotos que me regalo, junto con el soporte trasero de la rueda de repuesto y que expondré en alguna entrada posterior.


Mecánicamente no estaba tan bien, los frenos no hacían honor a su nombre, el eje de la dirección tenía mucha holgura y el embrague prácticamente no funcionaba.



La Vespa, como diseño y mecánica italiana, del período de la postguerra, supuso una innovación a todos los efectos. Se concibió para dar solución a los problemas de tráfico y movilidad urbana muy diferentes a los de ahora. Era un medio de locomoción asequible y sencillo de transporte, para aquellos que no podían permitirse el comprar un automóvil. Aparece en 1946.

Su nombre procede de un comentario de Enrico Piaggio (promotor de la Vespa) al ver el primer prototipo: "¡Parece una avispa!"

El artífice del diseño y la propia ingeniería no fue otro que el genial Corradino D'Ascanio, un técnico aeronáutico con una capacidad creativa impresionante: 

En 1919 inventa un horno eléctrico para la cocción del pan, en 1926 un cohete vengala de encendido retardado para aeronaves, en 1932 la hélice con rotor de inclinación variable en vuelo, en 1952 una máquina electroneumática para la catalogación y búsqueda rápida de documentos, hasta inventó una pitillera de bolsillo con apertura automática para uso personal.


D'Ascanio en 1932 supervisa la configuración de la construcción de un ambicioso túnel de viento, con cámaras aerodinámicas, en Finale Ligure. Inicialmente defectuoso, se convirtió en el banco de pruebas aeronáutico de Europa.




Para aquellos que quieran saber más sobre la historia de la Vespa, os recomiendo el libro de la fotografía que aparece a la izquierda de Ediciones Susaeta, "Atlas ilustrado de la Vespa". La mayor parte de los comentarios de esta entrada, figuran en el citado libro.


Está fantásticamente ilustrado y tiene todo lujo de detalles, desde la historia hasta los distintos modelos que han ido apareciendo a lo largo de los años.



La suelo utilizar los domingos que es cuando dispongo de algo de tiempo, básicamente para algún recado. Para ello tiene que haber unas condiciones climáticas adecuadas, pues el hecho de que lleve el motor en un lateral hace ya que su conducción en las curvas sea más complicada, si a eso unimos las limitaciones en la frenada hace que la capacidad de reacción ante un imprevisto sea muy limitada.


No obstante, con un día soleado y disponiendo de tiempo, para mi, es uno de los mayores placeres; se une lo antiguo con la historia y el disfrute del paseo. Su velocidad máxima está en torno a los 50 km/h, para eso la superficie tiene que ser plana, pues en cuestas algo pronunciadas me adelantan hasta las bicicletas. Sin embargo, te permite en el desplazamiento observar el dinamismo de la propia vida. Lo más bonito, los paisajes.





Me encanta "mantenerla", el ir reparando alguna que otra pieza, ajustarla, tenerla limpia y siempre en estado de revista, hace que puedas conocerla cada vez más. En ocasiones pasan meses y enciende sin mayores contratiempos. ¡¡¡Menuda máquina!!!


Espero que os haya gustado




domingo, 16 de febrero de 2014

Tintín en mí (2ª Parte)


VJSS
Figuras de distintos personajes
En la entrada anterior, hice referencia a que comentaría los motivos por los que me interesaba la obra de Hergé, vinculada a Tintín. Pues bien, Tintín desde el punto de vista del dibujo, es claro y sencillo, en él no existen las sombras y abunda un colorido puro. Respecto al guión de las distintas aventuras, está muy estudiado y vinculado a muchos objetos, lugares y personas reales que aparecen bajo distintos nombres. Además de lo artístico, predomina un personaje con muchos valores que representan el bien, la justicia,  la ética, la ayuda, etc... y siempre está dispuesto a defender al necesitado. 
VJSS
Fetiche Arumbaya de "La Oreja Rota"
No le importa correr riesgos y se apunta a todas las aventuras (a mí me pasa algo parecido con las cenas de los amigos…). En fin, que donde hay un problema, ahí se mete y procura arreglarlo sin importarle lanzarse desde un avión, un camión o saltar por una ventana. Nunca se amedrenta por nada.

Algunos amigos, con objeto de "pinchar" (Marcos, Juanjo…) siempre me salen con el asunto de la homosexualidad de Tintín, otros me hablan del maltrato a los animales vinculado a "Tintín en el Congo" o el sometimiento de la población indígena por la superioridad de la "raza blanca" que tratan de imputar a una tendencia que se ha criticado y etiquetado al autor. 
Yo, sin embargo, creo que la obra de Hergé como "hija de su tiempo", hay que entenderla bajo las circunstancias históricas en que se ha escrito y que para nada tiene que ver con lo que malintencionadamente se le imputa. Es verdad que la práctica totalidad de los personajes son hombres y que Castafiore es una excepción. Fuera de esa circunstancia, tenemos que saber que Hergé nació a principios del S. XX, trabajó en sus inicios en un periódico de corte religioso y que vivió dos guerras mundiales.
Una de las cosas que más me impresiona es lo documentadas que se encuentran sus obras. Tras las dos o tres primeras que podemos considerar más sencillas, hay un impresionante trabajo asociados a lugares, edificios, símbolos, vehículos, etc…
Os dejo un detalle de los muchísimos que hay en su obra y corresponde al castillo-residencia de el Capitán Haddock, en el que viven también Tintín, Milú, el Profesor Tornasol y el mayordomo Nestor.


La residencia de los personajes está inspirada en el castillo de Cheverny, en la región francesa del Loira; Hergé suprimió los módulos laterales quedando más pequeño.
El castillo aparece por primera vez en "El secreto del Unicornio" y era propiedad de un antepasado de el Capitán Haddock (el caballero Francisco de Hadoque). Realmente no lo hereda, lo adquiere para él, el profesor Tornasol por haber probado un submarino, inventado por él, en una misión.


VJSS
Castillo de Moulinsart
El libro que viene a continuación, es un ejemplo claro de lo comentado, figuran viñetas de los libros, en los que se asocian objetos de los distintos capítulos a objetos, fundamentalmente, que existen en la realidad. Libro digno de pertenecer a una colección sobre la obra de Hergé.


domingo, 2 de febrero de 2014

Tintín en mí (1ª parte)

Uno de los originales
Desde muy pequeño me ha encantado leer tebeos. Empecé por uno en concreto que me enganchó y sus personajes eran "Jano y Pirluit", lo debí de leer 40 veces o más. Hoy en día he indagado un poco sobre sus orígenes y resulta que su autor fue un belga llamado Pierre Cullifor, más conocido por PELLO, un excelente dibujante e "historietista" que creó al personaje de Jano en 1946, apareciendo más adelante en 1954 su amigo y compañero de fatigas, Pirluit. Estos personajes, por desgracia, desaparecieron en virtud de otros personajecillos que aparecieron como "invitados" en una de las historias. Y son, nada más y nada menos que "Los Pitufos". Hoy en día pueden volver a conseguirse en Dolmen Editorial.



Después, en la biblioteca municipal que existía en frente de mi casa, me aficioné a "Zipi y Zape" y "Mortadelo y Filemón" por no hablar de los "Don Mickey" que me compraba mi padre los domingos, cuando compraba el periódico. Paralelamente me fui iniciando en el dibujo y todo ello cuando eres pequeño, te permite evadirte e imaginarte una vida llena de aventuras y emociones…, hasta aquí todo normal.
Herge
Georges Remí -HERGÉ-

Entrando en materia, hay unos tebeos (para mi libros) que me pueden desde hace años y que además me han convertido en un coleccionista amateur. Y no es otro que el reportero y aventurero TINTÍN, creado por Georges Remí, más conocido como HERGÉ (pronunciación en francés de sus iniciales invertidas "R.G.").


"Las Aventuras de Tintín" constan de 24 álbumes, publicándose el primero en 1930 y el penúltimo en 1976, pues el  último quedó sin terminar al fallecer su autor, aunque se publicó con los bocetos que había (Tintín y el Arte-Alfa).


Puede parecer a muchos, algo extraño que un adulto se interese por un personaje como Tintín; de hecho, este tema suele ser objeto de bromas por parte de mis amigos, aunque evidentemente no saben sobre el personaje y su autor mucho. Hasta ahora nadie me ha hecho la pregunta adecuada, que es: ¿por qué te gusta Tintín? Y esto, lo dejaré pendiente hasta la siguiente entrada junto con algunos de los objeto de la colección, de momento os cuento que el próximo fin de semana, será en Madrid el 5º Encuentro Tintinólogo Anual, en la Fundación Carlos de Amberes, a la que ánimo a asistir a quienes puedan estar interesados en conocer más sobre el personaje y su autor.


Relación de libros de Tintín editados:


Sujeta libros de Tintín
  1· Tintín en el Congo 
  2· Tintín en América
  3· Los cigarros del faraón 
  4· El loto azul 
  5· La oreja rota 
  6· La isla negra 
  7· El cetro de Ottokar 
  8· El cangrejo de las pinzas de oro 
  9· La estrella misteriosa 
10· El secreto del Unicornio 
11· El tesoro de Rackham el Rojo 
12· Las siete bolas de cristal 
13· El templo del sol
14· Tintín en el país del Oro negro
15· Objetivo la luna
16· Aterrizaje la luna
17· El asunto Tornasol
18· Stock de coque 
19· Tintín en el Tibet 
20· Las joyas de la Castafiore 
21· Vuelo 714 para Sidney
22· Tintín y el lago de los tiburones

23· Tintín y los pícaros
24. Tintín y el Arte-Alfa
   Poster blog

domingo, 26 de enero de 2014

Reciclando una caja de botellas

Caja de botellas
Alguna que otra vez habrá caído en nuestras manos, alguna caja de botellas (con ellas o sin ellas). Sé de alguien que le encantan las cajas y guardarlo todo en las mismas. Es una forma de tener las cosas clasificadas, ordenadas y visualmente bonitas. 

Pues bien, os voy a contar algo muy fácil que cumple con lo comentado. 


Mi padre, que estaba muy enfermo sabía desde hace mucho que me encantaban las vespas, y mientras más antiguas, mejor.


Inició una colección para regalármela pero desgraciadamente falleció y, cumpliendo con su ilusión, mi madre me la acabó de completar.
El proceso

Quería que tuviesen un lugar destacado y tras mucho buscar una vitrina y no encontrar nada que me gustase, decidí a hacerla yo mismo. 

Para ello cogí una caja más bien plana de botellas, eliminé los separadores y tomé medidas del grosor de los separadores de las botellas y de lo que sería la puerta de la futura vitrina.

Acto seguido desmonte la caja por completo, la encolé y reforcé con pequeños clavos en los ángulos. Entretanto encargué en una cristalería lo que serían los estantes y la puerta de la vitrina.

La parte quizá más laboriosa fue la decoración. Utilicé restos de un papel pintado que tenemos en casa, de una "carta náutica". Hay que recortarlo con las medidas exactas de cada parte y pegarlo (utilicé una solución de cola de madera y agua).

Después ya solo queda colocar los estantes, la puerta y lo más importante:  LAS VESPAS.

Este fue el resultado, a ver que os parece:

En un lugar descatado
¡¡¡GRACIAS PAPÁ!!! ESPERO QUE TE GUSTE

lunes, 20 de enero de 2014

Siempre quise restaurar una bicicleta antigua.

Siento pasión desde siempre por las cosas antiguas. Creo que una de las formas de conectar con la vida, es tratar de recuperar y darle utilidad a algo abandonado y que el paso del tiempo le ha quitado esplendor. Poner lo mejor de uno mismo e ir disfrutando de los avances y aprendiendo. 

Me encantan las bicicletas, así que me puse manos a la obra, recurrí a Internet y localicé una bicicleta en Ferrol que desde luego por el aspecto, debía tener muchísimos años. Tras contactar con el vendedor, mi buen amigo Jesús que reside en las cercanías, fue a buscarla y además.........me la regaló (gracias Jesús); 

Y esto es lo que me encontré:

Se trataba de una bicicleta de varillas en la que figuraba lo que a duras penas se podía intuir, como la marca "LAGO".

El primer paso fue fotografiar todas las partes de forma meticulosa, primero y sobretodo para acordarme de como se vuelve a montar y después porque el teléfono es la mejor forma de llevar la "bici" encima a la hora de pedir presupuestos, encontrar piezas, etc...



Muchos de sus componentes son de la marca Orbea que por aquel entonces era de lo que más había. Tenía además un freno de cable, además de los de varillas, supongo que frenaba poco y daba mayor seguridad.

El despiece fue laborioso: tornillos oxidados, piezas casi soldadas por la suciedad, etc..., lo que más me costó fueron dos cosas: sacar el manillar y separar el plato de la biela. Respecto a la primera se solucionó de un martillazo en el tornillo de sujeción, tras acabar mi primo Julio y yo, casi sangrando por las manos de tanto tirar. La segunda, con mucha paciencia y tiempo.

Detalles del estado:

Estado manillar y frenos

Biela Orbea atornillada al plato
Marca "LAGO"


Sillín original
Una vez desmontada, llegue a la conclusión de que las ruedas había que tirarlas, ni compensaba, ni tenía mucho arreglo dado el estado de los bujes y la cantidad de "abollamientos" que tenían. Limpié todas las piezas y comencé con el lijado, dejándome las manos "destrozadas" entre la lija y el taladro. Opté por llevar guardabarros, cuadro y portabultos a una empresa que me los chorreó y lacó por un módico precio de unos 75€ (¡¡¡¡si lo llego a saber.......!!!!).
A partir de ahí, contacté por Internet con una tienda que os recomiendo a todos los amantes de la bicicleta clásica: "Bicicletas Clásicas Leo". Allí están Ana y Daniel, una pareja encantadora que ha hecho de su pasión, una filosofía de vida. En su local, retrocedes muchos años en el mundo de la bicicleta, además de que puedes encontrar casi de todo y si no lo tienen, te lo consiguen (http://www.bicicletasclasicasleo.com/).

Para el montaje, me armé de paciencia, lápiz y papel y fui tomando nota de todo lo que necesitaba. Recurrí también a una tienda local de un amigo, en la que me ayudaron con algunas dudas, ajustes y determinadas piezas. Gracias David (Norbike).


El asiento estaba destrozado y tuve que que sustituirlo, aún así lo guardo y trataré de ponerme con ello más adelante. Entre los numerosos problemas que tuve, lo más complicado fue encontrar la tornillería. Aprendí mucho: tornillos  de rosca "whitworth" (que no son muy comunes en España, pues es una rosca más utilizada actualmente fuera), tornillos de barrilete, prisioneros, etc…, y después una Dremel que me permitió que todo ajustara a la perfección.



Acabado y puesta a punto:


Ahora os muestro como ha quedado la bicicleta, tras varios meses y paciencia. Ha merecido la pena:

Versión "fixie"

Deseoso de montarla, le coloqué las ruedas, el manillar y los frenos de varilla, recién cromados. Evidentemente le falta la cadena, biela y pedal.

Del montaje lo más costoso fue la colocación de los muelles de los frenos, en el manillar. Conservé la dirección original. El color es verde ingles (RAL 6007) y la ruedas de color crema.





La bicicleta delante de una colección de coches de Tintín.

La única "modernidad", de vital importancia, es que en el buje trasero lleva un cambio incorporado de 7 velocidades con un freno de contrapedal. Esto es básico dado el peso de la bicicleta, la frenada tan delicada que tienen los frenos de varilla y, sobre todo, la cantidad de cuestas que hay en mi ciudad. 

Ahora tan sólo queda encontrar unas abrazaderas cromadas, para asir el cable del cambio a la barra diagonal y disimularla lo más posible. El otro elemento pendiente es el cubrecadenas que estoy esperando que "Bicicletas Leo" me lo suministre.



Detalle del manillar
Detalle del asiento



Y los mas importante de todo, disfrutarla al máximo con mi mujer y mis hijas. En cuanto la lluvia me lo permita….



martes, 4 de junio de 2013

Inaguración

Hoy martes, día 5 de noviembre de 2013, me inicio en esto de los blogs con la idea de que me ayude sobre todo a mi mismo y con la idea de organizar aquello que me gusta y transmitir, en  unos momentos de coyuntura económica adversa, paro, desmotivación, corrupción y falta de valores en general, alegría de vivir, optimismo, buenas noticias y hacer de las pequeñas cosas y de las relaciones humanas la base del transcurso vital. 

Desconozco a día de hoy, la frecuencia de las opiniones, pensamientos y actividades que iré trasladando a esta página. Lo que si haré es escribir sobre lo que me guste.